Moldblade

Moldblade

< Volver al Blog

Recubrimientos para acabados de piezas plásticas

Las piezas plásticas son fundamentales en numerosas industrias gracias a su versatilidad y eficiencia en la producción. Utilizadas en todo, desde productos de consumo hasta componentes industriales, las piezas inyectadas pueden ser optimizadas considerablemente mediante técnicas de recubrimiento avanzadas. Estos procesos de post-procesado no solo mejoran las características estéticas, sino también las mecánicas y funcionales de las piezas, permitiendo su adecuación a las necesidades del producto final y al presupuesto.

Coloreado de la Materia Prima

El coloreado de la materia prima es uno de los métodos más directos y eficientes para incorporar color en las piezas plásticas durante el proceso de inyección. Se realiza agregando pigmentos o colorantes a las resinas plásticas antes de la inyección en el molde. Esta técnica asegura una consistencia de color en toda la tirada de producción y es ideal para aplicaciones donde se necesita uniformidad del color, como en los envases de pared fina utilizados en la industria alimenticia. Estos envases no solo necesitan ser visualmente atractivos y uniformes, sino también cumplir con regulaciones específicas de contacto con alimentos.

Pintado

Aunque el pintado ha sido tradicionalmente un método común para finalizar piezas plásticas, su uso ha disminuido debido a la eficiencia y la sostenibilidad. El proceso de pintura puede llevar a preocupaciones medioambientales y de salud por la expulsión de gases tóxicos y elementos volátiles que produce. Además, se produce merma en exceso, especialmente en piezas de geometría compleja. Sin embargo, sigue siendo relevante para aplicaciones específicas donde se requieren acabados decorativos especiales, como juguetes y artículos de decoración donde los detalles finos y los efectos visuales son primordiales.

Deposición Física de Vapor (PVD)

La tecnología PVD involucra la vaporización de metales como titanio, zirconio, o cromo en un estado de plasma gaseoso dentro de una cámara de vacío. Los átomos vaporizados se depositan entonces en la superficie del substrato, formando una película delgada y uniforme. Este proceso permite un control preciso sobre el grosor y la composición del recubrimiento, resultando en mejoras notables en la resistencia a la corrosión, al desgaste y a la abrasión. Las aplicaciones de PVD son amplias, abarcando desde herramientas industriales y dispositivos médicos hasta componentes automotrices y electrónicos.

Cromado

El cromado es un proceso electroquímico utilizado para recubrir piezas plásticas con una capa de cromo, proporcionando un acabado de alto brillo y efecto espejo. Este acabado no solo mejora la estética del producto, sino que también aumenta su durabilidad y resistencia a la corrosión. Vamos a explorar en detalle las fases del proceso de cromado, los tipos de plásticos adecuados para este tratamiento, y las ventajas que ofrece.

Preparación Integral de la Superficie La pieza plástica se somete inicialmente a una serie de tratamientos para garantizar su idoneidad para el recubrimiento. Comenzando con varios baños de limpieza que incluyen el uso de solventes, agentes alcalinos y ácidos para desengrasar y limpiar completamente la superficie. Posteriormente, se realiza un proceso de etching con soluciones ácidas que microabrasan la superficie, creando una textura ideal para la adherencia del recubrimiento. Finalmente, la activación química prepara la superficie texturizada para recibir el recubrimiento metálico, asegurando una adherencia uniforme y duradera del cromo.

Aplicación de Capa Base y Cromado:

  1. Capa Base:

Antes de proceder al cromado, se aplica una capa base de níquel u otro metal compatible. Esta capa base sirve varios propósitos críticos:

  • Mejora de Adherencia: Proporciona una superficie intermedia que mejora la adherencia del cromo al plástico. Esto es especialmente importante para plásticos que tienen propiedades superficiales que pueden dificultar la adhesión directa del cromo.
    • Propiedades Protectoras: El níquel, siendo resistente a la corrosión y relativamente duro, ofrece una protección adicional contra el desgaste, el rayado y otros daños mecánicos. También actúa como una barrera para prevenir cualquier reacción adversa entre el plástico y el cromo.

La aplicación de esta capa se realiza a través de un proceso electroquímico similar al cromado, donde la pieza se sumerge en una solución de niquelado y se aplica una corriente eléctrica para depositar el níquel de manera uniforme sobre la superficie.

  • Cromado:

Tras la aplicación de la capa base, se procede al cromado propiamente dicho. Este proceso también es electroquímico y se lleva a cabo en una solución que contiene sales de cromo. Al aplicar una corriente eléctrica específica, el cromo se oxida y se deposita sobre la capa de níquel en forma de una fina película.

Control de Espesor: El grosor de la capa de cromo se controla cuidadosamente mediante la regulación de factores como el tiempo de exposición, la densidad de la corriente y la concentración de la solución de cromado. Esto es fundamental para asegurar la uniformidad del recubrimiento, la estética del acabado y la resistencia mecánica y química del producto final. El espesor del recubrimiento afecta directamente a la calidad y al precio del producto. Cuanta mayor espesor, más calidad. 

Finalización y Curado: Una vez completado el cromado, la pieza se enjuaga cuidadosamente para eliminar cualquier residuo de la solución y se seca. El proceso de curado puede requerir condiciones de temperatura controlada para optimizar las propiedades del recubrimiento.

Plásticos Adecuados para el Cromado

No todos los plásticos son adecuados para el cromado, ya que el proceso requiere que el material pueda resistir los pre-tratamientos ácidos y alcalinos y que sea capaz de adherirse eficazmente al cromo. Los plásticos más utilizados para el cromado incluyen:

  • ABS (Acrilonitrilo Butadieno Estireno): Es uno de los materiales más populares debido a su buena adhesión al cromo gracias al butadieno y su resistencia a las temperaturas y químicos utilizados en el proceso de cromado.
  • PC/ABS (Policarbonato/Acrilonitrilo Butadieno Estireno): Una mezcla que combina la resistencia y la flexibilidad del PC con la excelente adhesividad y la facilidad de procesamiento del ABS.

Ventajas del Cromado en Piezas Plásticas

  • Estética Mejorada: El cromado proporciona un acabado brillante y de efecto espejo que es altamente deseable para accesorios decorativos.
  • Resistencia a la Corrosión: El cromo es altamente resistente a la oxidación y la corrosión, lo que es ideal para piezas utilizadas en entornos húmedos o que se exponen a condiciones meteorológicas.
  • Durabilidad: La capa de cromo aumenta la dureza superficial de las piezas plásticas, aumentando su resistencia al desgaste y al rayado.
  • Uniformidad del Recubrimiento: La aplicación electroquímica asegura que incluso las superficies complejas se recubran de manera uniforme sin irregularidades.

El cromado se diferencia entre cromado decorativo y cromado duro. El primero es meramente estético, con menor espesor, mientras que el segundo, con un mayor espesor, se aplica para productos cuya funcionalidad requiera de propiedades mecánicas superficiales específicas.

IML (In Mold Labeling)

El proceso de In Mold Labeling (IML) integra la etiqueta dentro del molde durante la fase de inyección, fusionando la etiqueta con el material plástico. Esto resulta en una decoración duradera y resistente al desgaste. IML es especialmente popular en envases de alimentos y bebidas debido a su capacidad para producir acabados de alta calidad que son resistentes a la humedad y a los cambios de temperatura. 

IMD (In Mold Decoration)

In Mold Decoration (IMD) es un proceso similar a IML pero más centrado en la estética y la funcionalidad. Una lámina decorativa se coloca en el molde antes de la inyección de plástico. El plástico fundido se inyecta detrás de la lámina, fusionándose con ella y transfiriendo el diseño o textura directamente a la superficie de la pieza final.

Tampografía

La tampografía es un método de impresión indirecto que utiliza un tampón de silicona para transferir la tinta de una placa grabada a cualquier superficie irregular o plana. Es muy utilizada para imprimir en objetos pequeños y de formas complejas, como botones de dispositivos electrónicos, juguetes y herramientas.

Serigrafía

La serigrafía implica presionar la tinta a través de una malla estirada en un marco, con un diseño bloqueado en ciertas áreas. La tinta pasa a través de las áreas desbloqueadas y se transfiere a la superficie del objeto, lo que la hace ideal para logotipos y gráficos en grandes volúmenes de producción. Este tipo de recubrimiento no es rentable para tiradas bajas, ya que precisa de varias pantallas para cada diseño. 

Hidroimpresión

Finalmente, la hidroimpresión, también conocida como transferencia de agua o impresión por inmersión, implica colocar una película con un diseño impreso sobre el agua en una cuba. La pieza se sumerge y la película se envuelve alrededor de ella, adheriendo el diseño a la pieza mediante un activador químico. Este método es popular para aplicar diseños detallados y gráficos a piezas de formas complejas.

Cada uno de estos métodos tiene sus ventajas específicas y limitaciones, dependiendo del tipo de producto y de las necesidades del proyecto. Incorporar estos métodos en la producción puede ayudar a alcanzar una amplia gama de efectos estéticos y funcionales, mejorando el atractivo y la durabilidad del producto final.

Cada método de recubrimiento tiene sus ventajas específicas y limitaciones, dependiendo de la aplicación del producto final. Al comprender y aplicar adecuadamente estas técnicas, los fabricantes podemos cumplir y superar las expectativas del cliente. En Moldblade, gracias a nuestro departamento técnico, podemos asesorarte con las mejores soluciones para tu proyecto, no dudes en contactarnos.

26 noviembre, 2024

Compartir:

Siguiente artículo:

Avances en Recubrimientos y Tratamientos Térmicos de Moldes en la Industria de Inyección de Plástico