Materiales para la Construcción de Moldes de Inyección
Los materiales que se utilizan para la fabricación de moldes para inyección de termoplásticos han de cumplir las siguientes propiedades:
Fácil mecanización en estado de suministro
Templabilidad alta
Adecuados para el pulido
Alta resistencia contra el desgaste y la corrosión
Máxima resistencia a abrasión y al desgaste
Gran estabilidad dimensional
Elemento de lista
Gran resistencia a la corrosión
Buena conductividad térmica
Buena resistencia a la fatiga mecánica y térmica
Los aceros más comúnmente empleados en la construcción de moldes son los siguientes:
Aceros de cementación: Son aceros pobres en carbono (menor del 0.1%). Durante el posterior proceso de cementación el carbono se difunde en la superficie dando mayor resistencia al desgaste.
Aceros de bonificación: El acero se somete a un tratamiento térmico consistente en templar la pieza y posteriormente en calentarla consiguiendo así una alta resistencia mecánica y tenacidad.
Aceros para temple integral: Se emplean para conseguir una estructura homogénea, y tienen contenidos en carbono entre el 0.3 y 0.4%. Dan un buen resultado con materiales abrasivos como son la fibra de vidrio.
Aceros resistentes a la corrosión: Permiten una mayor resistencia a la corrosión sin necesidad de los galvanizados, los cuales, si bien dan mayor resistencia a la corrosión, pueden provocar agrietamiento debido a la elevada presión en las aristas de cierre.
Aceros comerciales utilizados en la fabricación de moldes:
AISI P20 : Acero pretemplado al Ni-Cr-Mo que se suministra a ~310 Brinell, cuenta con excelentes propiedades de pulido y fotograbado. Adecuado para una amplia gama de moldes de inyección.
Portamoldes: Aceros 1730 acero al carbono de baja aleación con una buena mecanibilidad y soldabilidad. Es apto para la producción de moldes, portamoldes
Placas: Aceros 1730 o P20
Insertos: p20, acero 2738, 2344 y 2083 los más comunes
Los procesos de tratamiento de superficies en moldes de acero son los siguientes:
El objetivo de estos tratamientos es aumentar la dureza superficial, la resistencia al desgaste y el límite de la presión superficial, y mejorar su comportamiento al desplazamiento y a la corrosión. Para decidir el tipo de tratamiento, se analiza la función de la pieza a inyectar y el material de la misma.
Nitruración: Se consiguen durezas superficiales grandes que proporcionan gran resistencia al desgaste y a la fatiga. No se ha de emplear en aceros resistentes a la corrosión ya que disminuye esta propiedad.
Cementación: Normalmente utilizada en aceros bajos en carbono (menos del 0.1%C), experimentándose un aumento de la dureza superficial.
Cromado duro: El recubrimiento se realiza por aportación electrolítica sobre la superficie, de esta forma se consiguen superficies más duras y resistentes al desgaste y a la corrosión. Se suele emplear en reparaciones para aportar material, y contra medios corrosivos.
Niquelado duro: La dureza que aporta el niquelado es muy superior a la que posee el material base, lo que en ocasiones es un inconveniente pues puede desprenderse cuando las tensiones son grandes debido a que cada material se deforma de un modo diferente.
Recubrimiento con metal duro: Se obtiene una gran resistencia al desgaste y buena resistencia a la corrosión.
Materiales especiales
Los materiales especiales utilizados son los siguientes:
Aleaciones de metal duro: Los contenidos de carburos son elevados y se utiliza en zonas de elevado desgaste como son la zona de entrada de un molde.
Materiales con conductividad de calor elevada. La regulación óptima de la temperatura en un molde es fundamental para la determinación del tiempo de enfriamiento y de ciclo.
Este tipo de materiales se introduce en forma de insertos o postizos, solamente en zonas problemáticas del molde en cuanto a su enfriamiento, obteniéndose así un enfriamiento homogéneo en la pieza. Se usan materiales no férreos como son el cobre, cobre-berilio, cobre-cobalto-berilio, cobre-cromo-circonio, etc., ya que poseen una conductibilidad muy superior a la de los aceros, pero sin alcanzar la misma dureza y resistencia.